Qué es la dieta BARF para perros (ACBA): menú, proporciones, transición y riesgos
La dieta BARF (ACBA) es una forma de alimentar a tu perro con comida cruda y fresca (carne, huesos carnosos, vísceras y una parte pequeña de verduras/fruta), buscando una alimentación más “natural” que el pienso. Bien planteada, puede ser una opción válida, pero requiere higiene, equilibrio y adaptación progresiva.
Dieta BARF para perros, en 30 segundos
Qué es: comida cruda y fresca basada en ingredientes de origen animal + un extra vegetal opcional.
Proporción orientativa: 50% huesos carnosos, 30% carne/pescado sin hueso, 10% vísceras (la mitad hígado) y 10% verduras/fruta.
Cómo empezar sin liarla: transición gradual (7–10 días), introduce vísceras y huesos al final y observa las heces.
Seguridad básica: congela la carne ≥72 h, descongela en nevera y extrema la higiene en cocina.
Ojo: si tu perro tiene enfermedad, es cachorro muy pequeño o en casa hay personas inmunodeprimidas, mejor consultar antes con un profesional.
🥩 Calculadora BARF para perros
Introduce el peso y selecciona la etapa y actividad de tu perro:
* Esta herramienta es orientativa. Ajusta la dieta con la ayuda de tu veterinario/nutricionista.
🎙️ Vídeo / Podcast: te lo explico en voz (basado en esta guía)
¿Ya has calculado la ración? Genial. Debajo tienes un vídeo/podcast donde repasamos esta guía en formato fácil: proporciones, cómo empezar sin liarla y los puntos clave de seguridad e higiene. Si te quedan dudas antes de hacer el cambio, dale al play y te quedas con el plan claro.
¿Qué es la dieta BARF para perros y en qué se diferencia del pienso?
La dieta BARF (ACBA) es una forma de alimentación basada en ingredientes crudos y frescos, donde la base suele ser carne, huesos carnosos, vísceras y, según el enfoque, una parte pequeña de verduras/fruta. La idea es construir una dieta más cercana a lo que comería un carnívoro, pero bien equilibrada y con medidas de higiene.
En cambio, el pienso es un alimento procesado (normalmente cocinado y deshidratado) pensado para ser cómodo y estable. Puede funcionar bien en muchos perros, pero su calidad varía mucho según ingredientes y fórmula.
Diferencias BARF vs pienso
BARF: ingredientes frescos y control total de lo que come tu perro.
Pienso: alimento procesado, práctico y estable, con calidad muy variable.
Punto clave BARF: equilibrio nutricional + higiene.
Punto clave pienso: elegir una buena fórmula que le siente bien.
Importante: si tu perro tiene enfermedades (digestivas, renales, pancreatitis…), es cachorro muy pequeño o convive con personas inmunodeprimidas, lo mejor es consultarlo con un veterinario/nutricionista antes de empezar.
Proporciones de la dieta BARF: 50/30/10/10 (explicado fácil)
La proporción BARF más usada como punto de partida es 50/30/10/10. Ojo: es orientativa, y se ajusta según edad, actividad y cómo le sienta a tu perro (sobre todo por las heces y el peso).
Reglas rápidas para no liarla:
Empieza por carnes fáciles (pollo/pavo) y cambia poco a poco.
Las vísceras se introducen gradual (si no, diarrea casi asegurada).
Los huesos siempre crudos (cocidos se astillan).
Si ves heces muy blancas/duras → demasiado hueso. Si muy blandas → reduce vísceras o grasa.
| Componente | % orientativo (rango) | Función principal | Ejemplos prácticos | Consejos rápidos |
|---|---|---|---|---|
| Huesos carnosos | 50% (rango 40–60%) | Calcio, limpieza dental, consistencia de heces | Alitas/muslos de pollo, carcasas, codorniz, costillas carnosas | Siempre crudos y con ≥50% carne; introducir poco a poco |
| Carnes/pescados sin hueso | 30% | Proteína y grasa (energía, piel y pelo) | Ternera, pollo, pavo, cordero, cerdo; pescado blanco/azul | Variar 3–4 carnes; pescado 1–3 veces/semana |
| Vísceras | 10% | Vitaminas A, B, D, E, K; minerales; CoQ10 | Hígado (≈5%), riñón, corazón, bazo | Introducción gradual; escaldar si la textura “echa para atrás” |
| Verduras y frutas | 10% | Fibra, vitaminas y antioxidantes | Calabaza, zanahoria, manzana, yuca | Mejor trituradas o cocidas para que las aproveche mejor |
Ejemplo práctico (perro de 10 kg)
Si tu perro pesa 10 kg y come 2,5% de su peso al día, su ración diaria sería 250 g/día. Reparto con 50/30/10/10:
125 g huesos carnosos (50%)
75 g carne/pescado sin hueso (30%)
25 g vísceras (10%) (de esto, aprox. 12 g hígado)
25 g verduras/fruta (10%)
Si tu perro es más activo: usa 3% (300 g/día). Si es sedentario: 2% (200 g/día).
¿Por qué la dieta BARF se considera una alimentación “más natural”?
Porque el perro tiene una anatomía orientada a masticar y digerir alimentos de origen animal (dientes para desgarrar, estómago ácido e intestino relativamente corto). Aun así, lo importante no es “crudo sí o no”, sino que la dieta esté bien equilibrada y se maneje con higiene.
Boca y dientes
Muy poca amilasa salivar (enzima para carbohidratos complejos): los perros no están diseñados para romper cereales en la boca.
Caninos largos y curvados, mandíbula de movimiento vertical, orientada a desgarrar y tragar trozos.
Faringe y esófago
Mucosa abundante y gran dilatación: permite tragar piezas relativamente grandes rápido y seguro.
Estómago
Gran volumen (acumular mucha comida de una vez) y pH muy ácido (1–2): digiere carne cruda y tejidos resistentes. Alimentaciones inadecuadas pueden alcalinizar el pH y volverlo menos eficiente.
Intestinos
Intestino delgado corto (3–6× longitud corporal): no optimiza carbohidratos complejos. En cambio, absorbe muy bien proteínas y grasas.
Pienso vs BARF: cómo elegir bien (sin fanatismos)
El pienso puede ser una opción perfectamente válida si eliges uno de buena calidad y le sienta bien a tu perro. La clave no es “BARF vs pienso”, sino qué come tu perro y cómo le afecta (peso, energía, piel/pelo y heces).
Checklist rápido para elegir un buen pienso
Que la proteína animal esté entre los primeros ingredientes.
Ingredientes claros y entendibles (sin “mezclas” raras).
Que no le provoque gases, diarrea, picores o heces gigantes.
Si tu perro tiene alergias o digestión delicada, valora un pienso monoproteico o pautado por tu veterinario.
Si eliges BARF, aplica el mismo criterio: ingredientes de calidad, higiene y proporciones bien montadas. En ambos casos, si hay enfermedades previas, lo ideal es revisar la dieta con un profesional.
Transición a BARF: adaptación digestiva paso a paso (sin diarreas)
Antes de cambiar, infórmate y consulta con veterinario/nutricionista canino con experiencia en alimentación natural. Un análisis de sangre al inicio y otro tras unos meses ayuda a evaluar la idoneidad.
Métodos de transición
Ayuno 24 h (controvertido): no para cachorros, ancianos o enfermos; puede provocar vómitos por gastritis. La comida natural se digiere fácil; el “descanso” suele ser innecesario.
Dieta mixta (pienso + BARF): desaconsejada por tiempos de digestión distintos (fermentaciones, gases, riesgo de dilatación). Si se hace en razas predispuestas, separa tomas.
Dieta blanda (preferida): 75% carne cruda (pollo/pavo/pescado blanco) + 25% vegetales cocidos o triturados (calabaza, yuca, manzana, zanahoria). Permite adaptación suave y minimiza diarreas. Luego introduces el resto de elementos BARF poco a poco. También útil para episodios digestivos.
Transición a BARF en 7 días (sin mezclar con pienso)
Al pasar de pienso a BARF, es normal que el sistema digestivo necesite unos días para adaptarse. Lo más importante es ir poco a poco, introducir cambios de forma progresiva y observar heces, energía y apetito.
Si aparecen heces blandas o gases, no significa que “la BARF vaya mal”: normalmente es que el cambio ha sido demasiado rápido o has metido demasiada grasa/vísceras de golpe. Mantén 24–48 horas una dieta más simple (carne fácil + calabaza cocida) y vuelve a subir el ritmo más lentamente.
Consulta al veterinario si hay vómitos repetidos, sangre, decaimiento fuerte o diarrea intensa que no mejora en 24–48 h.
| Día | Composición de la ración | Objetivo | Señales a vigilar | Acción si hay molestia |
|---|---|---|---|---|
| 1–2 | Dieta blanda: 75% carne fácil (pollo/pavo/pescado blanco) + 25% verduras cocidas/trituradas (calabaza, zanahoria, yuca) | Adaptar estómago e intestino | Heces blandas, gases leves | Mantén 24–48 h más la dieta blanda |
| 3–4 | Igual que 1–2 + minitests de nuevas carnes (poco a poco) | Evaluar tolerancias | Picores/ojos/otitis | Retira el último alimento introducido |
| 5 | Añade vísceras al 5% (parte de la ración) | Aporte vitamínico gradual | Heces más oscuras | Reduce a 2–3% y sube lentamente |
| 6 | Sube vísceras al 10% total | Completar micronutrientes | Flatulencias | Vuelve temporalmente a 5% |
| 7 | Introduce huesos carnosos (ración ya en 50/30/10/10) | Calcio, higiene dental | Ansiedad al masticar | Ofrece piezas grandes y sujétalas; sesiones cortas |
Notas clave:
• No microondas para huesos; congela carnes ≥72 h; descongela en nevera.
• Supervisa siempre las primeras tomas con huesos.
• Evita mezclar pienso y BARF en la misma comida (tiempos de digestión distintos).
Componentes BARF: qué aporta cada uno y errores típicos (muy práctico)
Ya has visto la proporción 50/30/10/10. Aquí te explico para qué sirve cada parte y, sobre todo, los errores más comunes que causan diarrea, estreñimiento o desequilibrios.
| Componente | % orientativo | Para qué sirve | Error típico | Solución rápida |
|---|---|---|---|---|
| Huesos carnosos | 40–60% | Calcio, limpieza dental, consistencia de heces | Pasarse de hueso → heces blancas y duras | Baja hueso y sube carne |
| Carnes / pescado | 30% | Proteína y grasa (energía, piel y pelo) | Siempre la misma proteína | Rota 3–4 proteínas |
| Vísceras | 10% (hígado ≈ 5%) | Vitaminas y minerales | Meter 10% de golpe → diarrea | Empieza 2–5% y sube poco a poco |
| Verduras / fruta | 10% | Fibra y micronutrientes (mejor triturado o cocido) | Mucha fruta → heces blandas | Más verdura, menos fruta |
| Cereales / legumbres (opcional) |
≤2% y no diario | Solo si los usas y le sientan bien | Gases / mala tolerancia | Muy cocido y poca cantidad |
Si las heces salen duras/blancas: baja hueso.
Si salen blandas: baja vísceras/grasa y ve más lento.
Complementos y suplementos en la dieta natural
Aquí tienes una guía clara con proporciones, beneficios y mitos, diferenciamos complementos (alimentos naturales apropiados) de suplementos (apoyos puntuales o por patología).
Complementos recomendados
Huevo (ideal crudo): la biotina del propio huevo neutraliza la avidina; no hace falta cáscara si hay huesos carnosos.
Colágeno natural: careta de cerdo, peces cartilaginosos, moluscos, oreja, patas, tráquea. Excelente condroprotector (cachorros de razas grandes, deportistas, seniors). Puedes prepararlo en gelatina natural.
Grasa extra (5–10% adicional) para perros deportistas o muy activos: carnes grasas o, puntualmente, atún/sardinas
Suplementos (según caso) — guía rápida
| Suplemento | Para qué se usa | Ejemplos / formato | Dosis orientativa | Ojo / precauciones |
|---|---|---|---|---|
| Probióticos | Apoyo a la flora intestinal (especialmente en transición) | Yogur natural, kéfir (leche o agua), tripa verde | Según tamaño y tolerancia | Introduce poco a poco; si hay diarrea, reduce |
| Omega-3 (EPA/DHA) | Piel/pelo y apoyo antiinflamatorio | Aceite de salmón u otra fuente animal | 300 mg EPA+DHA / 15 kg | Ojo si hay pancreatitis o dietas muy grasas |
| Algas marinas | Apoyo nutricional e inmunitario | Espirulina, kelp, chlorella | Según producto | Si usas kelp, cuidado con exceso de yodo |
| Hongos funcionales | Apoyo antioxidante e inmunitario | Reishi, shiitake, maitake, cordyceps, champiñón del sol | Según producto | Consulta si toma medicación o hay patologías |
| Aloe vera | Apoyo digestivo (acidez, diarrea, vómitos) y antiinflamatorio | Zumo alta pureza 90–95% | Según producto | No uses “cualquier aloe”; elige apto para consumo y dosifica |
| Desparasitantes “naturales” | Apoyo complementario (no siempre suficiente) | Ajo, semillas de calabaza/papaya, levadura, aceite de coco | Ajo: 1 diente / 15 kg | Ajusta al parásito; en infestación, mejor pauta veterinaria |
| Cúrcuma (Golden Paste) | Apoyo digestivo y antiinflamatorio | Pasta con cúrcuma + aceite + pimienta | Según tolerancia | Evitar en obstrucción biliar, problemas de coagulación o úlceras |
| Levadura de cerveza | Piel, estreñimiento y apoyo “repelente” | Levadura en polvo/tabletas | Según tamaño | Puede dar gases; no conviene en otitis por levaduras |
| Vinagre de manzana | Apoyo digestivo y encías; uso tradicional en ITU con pH alcalino | Mejor ecológico con “madre” | Según tolerancia | No usar si hay gastritis/reflujo; introduce muy poco |
| Calcio | Equilibrar fósforo si NO hay huesos carnosos | Harina de hueso, cáscara de huevo, cal de algas | Según receta | Si ya hay huesos, no añadas calcio extra sin revisar |
Respecto a la desparasitación natural te lo dejo explicado aquí: guía de desparasitación en perros (calendario y señales).
Importante: consulta con un profesional antes de suplementar; lo “natural” también puede interaccionar con medicamentos o ser contraproducente en ciertos casos.
Alimentos a evitar (y mitos comunes)
| Alimento / producto | Riesgo principal | Qué hacer |
|---|---|---|
| Huesos cocinados y espinas grandes | Se astillan y pueden causar atragantamiento o lesiones | Solo huesos crudos y adecuados al tamaño; retira espinas problemáticas |
| Chocolate | Teobromina (tóxico, sobre todo a dosis altas) | Evitar siempre |
| Leche | Frecuente intolerancia a la lactosa | Mejor yogur o kéfir (si lo tolera) |
| Cebolla y ajo | Tiosulfatos (a dosis altas); la cebolla puede causar anemia hemolítica | Evitar cebolla; si usas ajo, que sea dosificado y con prudencia |
| Uvas y pasas | Riesgo de fallo renal en perros susceptibles | Evitar siempre |
| Aguacate | Piel y hueso problemáticos; la pulpa es muy grasa | Evitar piel/hueso; pulpa solo con moderación (o mejor evitar) |
| Tomate | Planta y frutos verdes son problemáticos | Solo tomate rojo maduro en poca cantidad |
| Nueces de macadamia | Dudas sobre toxicidad y muy grasas | Mejor evitar |
| Otros | Ingredientes irritantes/ultraprocesados | Evita alcohol, café, embutidos, bollería y fritos |
Si quieres una lista completa y actualizada, mira estos alimentos prohibidos para perros.
| Mito | Realidad (explicación rápida) | Qué hacer / consejo práctico |
|---|---|---|
| “La carne cruda vuelve agresivo” | La agresividad suele estar relacionada con conducta y manejo (p. ej., protección de recursos), no con “comer crudo”. | Trabaja hábitos de comida tranquilos y consulta a un educador canino si hay protección de recursos. |
| “La carne cruda trae parásitos” | Usando carne apta para consumo y congelación previa se reducen riesgos, pero la higiene es clave. | Congela ≥72 h, descongela en nevera y aplica higiene de cocina (tabla/cuchillos/manos). |
| “Se atragantan con huesos” | El riesgo baja mucho con elección correcta del hueso, tamaño adecuado y supervisión. | Empieza con piezas grandes, siempre crudas, y supervisa las primeras tomas. |
| “El pienso es completo y equilibrado” | Puede serlo, pero depende de la fórmula y calidad. No todos los piensos son iguales. | Elige piensos con ingredientes claros y buena proteína; observa heces, piel/pelo y energía. |
| “Hace falta ser veterinario nutricionista” | No hace falta “ser experto”, pero sí seguir una guía fiable y entender proporciones e higiene. | Empieza simple, usa la calculadora y revisa con un profesional si hay dudas o patologías. |
| “Es más cara” | Depende de cómo compres y planifiques. Puede acercarse a piensos premium. | Compra por lotes, usa cortes económicos y planifica menús semanales. |
| “Lleva mucho tiempo” | Al principio cuesta, pero con preparación por lotes se vuelve rutina. | Prepara raciones para 7–14 días y congela en tuppers/bolsas. |
| “Mucha proteína da fallo renal” | En perros sanos, la proteína de calidad no suele ser el problema. Si hay enfermedad renal, hay que individualizar. | Si tu perro tiene patología renal, consulta al veterinario antes de cambiar la dieta. |
| “Hay que cocinarlo todo” | En BARF la base es cruda. Aun así, algunas verduras se toleran mejor cocidas o trituradas. | Verduras trituradas o cocidas; nunca huesos cocidos (se astillan). |
| “La carne cruda daña hígado o piel” | No es “la carne” por sí misma: lo que da problemas suele ser una dieta desequilibrada o mala higiene. | Respeta proporciones, rota ingredientes y ajusta si hay diarrea/estreñimiento. |
| “Pienso vegano es saludable” | Puede ser difícil de formular bien. Si se hace, suele requerir control profesional y suplementación específica. | Si te planteas dieta vegana, hazlo solo con supervisión veterinaria/nutricional. |
Respecto a si es más cara si quieres números reales, aquí tienes una calculadora con opción BARF: cuánto cuesta mantener un perro en España.
Preparación y almacenamiento
En esta guía resolvemos qué carnes y vísceras usar y cómo hacer la transición sin diarreas.
Mismas normas de higiene que en tu cocina: utensilios limpios, lavar frutas y verduras, manos limpias
Congelación
Obligatoria para ingredientes animales: ≥72 horas a −18 °C para Anisakis y control bacteriano. Usa carnes “human grade”.
Descongelación
En nevera, nunca a temperatura ambiente. No descongeles huesos carnosos en microondas (se resecan y se astillan). No ofrezcas congelado directo (puede provocar vómitos).
Opción eco: alimentos ecológicos (más naturales, normalmente más costosos).
Ración diaria orientativa según peso y etapa
Categoría sugerida: Menús BARF
Guía rápida: Adulto sedentario ≈ 2% del peso; adulto normal 2,5%; adulto activo 3%; cachorro 5–6%.
(Cálculo en gramos/día; ajusta según condición corporal y actividad.)
| Peso (kg) | Adulto 2% | Adulto 2,5% | Adulto 3% | Cachorro 5–6% |
|---|---|---|---|---|
| 3 | 60 g | 75 g | 90 g | 150–180 g |
| 5 | 100 g | 125 g | 150 g | 250–300 g |
| 10 | 200 g | 250 g | 300 g | 500–600 g |
| 20 | 400 g | 500 g | 600 g | 1.000–1.200 g |
| 30 | 600 g | 750 g | 900 g | 1.500–1.800 g |
| 40 | 800 g | 1.000 g | 1.200 g | 2.000–2.400 g |
Tip: reparte en 2 tomas (3 en cachorros). Revisa cada 2–3 semanas y ajusta si ves sobrepeso o delgadez.
Posibles beneficios de la dieta BARF (según el perro)
Ojo: estos beneficios no están garantizados y dependen de cada perro, de la calidad de los ingredientes y de que la dieta esté bien equilibrada. Si tu perro tiene una patología, consulta con un profesional.
Mejoras físicas
Heces pequeñas y menos olorosas (mejor asimilación).
Beben menos agua (alto contenido hídrico del alimento).
En algunos perros, roer huesos recreacionales puede ayudar a reducir placa. Aun así, la higiene dental sigue siendo importante.
Algunos tutores notan mejor pelaje y menos olor, sobre todo si antes la dieta no le sentaba bien.
Puede mejorar el aliento si disminuye la placa dental o si la digestión va más fina, pero no es automático.
Más músculo y peso saludable: proteína de alta calidad.
Mejor salud articular (colágeno natural, mejor composición corporal).
Mejoras psicológicas
Más apetito incluso en perros tiquismiquis.
Menos coprofagia (mejor saciedad).
Menos estrés y mayor satisfacción al roer y masticar.
Algunos perros muestran más vitalidad si la dieta les encaja y están en su peso ideal.
Conclusiones y recomendaciones
La dieta BARF puede ser una buena opción si te organizas y la haces con cabeza: proporciones orientativas, higiene y transición progresiva. No hay una dieta “mágica” para todos los perros: lo importante es que tu perro esté en su peso, tenga energía estable, piel/pelo bien y digestiones normales.
Antes de empezar, recuerda:
Empieza simple y ve subiendo poco a poco (sobre todo con vísceras y huesos).
Congela la carne ≥72 h, descongela en nevera y mantén higiene de cocina.
Si tu perro tiene una enfermedad o dudas, consulta con un veterinario/nutricionista.
Y si quieres completar el pack, aquí tienes la guía de cuidados del perro.
Preguntas frecuentes
¿Cómo se le da la dieta BARF a un perro?
Para empezar con seguridad (y que Google entienda qué es la dieta BARF para perros), sigue estos pasos:
Calcula la ración diaria: adulto 2–3% del peso; cachorro 5–6%.
Aplica las proporciones orientativas: 50% huesos carnosos, 30% carnes/pescados sin hueso, 10% vísceras, 10% verduras/frutas.
Haz transición en 7 días: dieta blanda 75/25, introduce vísceras al 5% y sube a 10%, añade huesos carnosos al final.
Congela carnes ≥72 h a −18 °C y descongela en nevera.
Supervisa la masticación, ofrece piezas grandes y revisa periódicamente con tu veterinario.
¿Por qué la dieta BARF no es buena?
No es que “no sea buena”, es que puede ser inadecuada si se hace mal. Los problemas llegan por desequilibrios (calcio/fósforo, micronutrientes), mala higiene (bacterias), uso de huesos cocinados (se astillan) o falta de adaptación en perros con patologías. Solución: planificar el menú, respetar proporciones, congelar y manipular bien, introducir cambios gradualmente y contar con un profesional en nutrición canina para ajustar a la edad, peso y estado de salud.
¿Qué dicen los veterinarios sobre la dieta BARF?
Hay opiniones diversas. Muchos veterinarios recalcan que, si se opta por BARF, debe ser completa, equilibrada y segura, con controles periódicos (peso, heces, analíticas) y cambios según patologías. Otros prefieren dietas comerciales completas (crudas con tratamiento HPP o cocidas) por su estandarización. El punto de unión: personalizar la alimentación del perro, evitar riesgos higiénicos y asegurar el equilibrio nutricional.
¿Los veterinarios recomiendan BARF?
Algunos sí, sobre todo los formados en nutrición natural, siempre que el menú esté bien formulado, se use materia prima apta para consumo humano y se mantenga la higiene. Otros recomiendan alternativas cocinadas balanceadas o crudas comerciales certificadas. La clave es buscar un profesional con experiencia en dietas naturales que formule o revise el plan de tu perro.
¿Cuántas veces al día se debe dar la dieta BARF a mi perro?
Cachorros: 3–4 tomas diarias.
Adultos: 1–2 tomas (mejor 2 para digestiones estables).
Seniors o estómago sensible: 2–3 tomas pequeñas.
Mantén horarios regulares, agua fresca disponible y evita ejercicio intenso 30–60 minutos antes y después de comer.
¿Qué pasa si cocino la dieta BARF?
Si cocinas, deja de ser BARF (que es cruda) y pasa a ser dieta casera cocida. Cocinar puede cambiar la disponibilidad de nutrientes y nunca debes dar huesos cocinados (se astillan). Si prefieres cocinar, formula un menú completo (proteína, grasa, carbohidrato opcional, verduras) y suplementa calcio si no hay huesos (p. ej., cáscara de huevo molida o harina de hueso). Conserva higiene y consulta para ajustar micronutrientes.
¿Qué significa BARF en castellano?
BARF proviene de Biologically Appropriate Raw Food (o Bones And Raw Food). En castellano se usa Alimentos Crudos Biológicamente Apropiados y la sigla ACBA. Resume la idea de ofrecer comida cruda y fresca apropiada para la especie canina, con énfasis en variedad y calidad.
¿Qué carnes le puedo dar a mi perro?
Varía 3–4 tipos a la semana, siempre aptas para consumo humano:
Aves: pollo, pavo, codorniz.
Roja: ternera/vacuno, cordero, caballo; cerdo según tolerancia y proveedor.
Pescado: blanco (merluza) y azul (sardina, caballa) 1–3 veces/semana; evita grandes depredadores por metales pesados y congela 72 h por Anisakis.
Consejos: no uses embutidos ni carnes adobadas, retira espinas grandes, no des huesos cocinados y mantén siempre buenas prácticas de higiene.
Salva Ordaz
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10 comentarios en “Qué es la dieta BARF para perros (ACBA): menú, proporciones, transición y riesgos”
Este tipo de dietas son un poco más trabajosas que el típico pienso pero la verdad es que el perro lo agradece con salud y energía
Girona
Muy buen artículo 🙌🔥. La verdad, había escuchado hablar mil veces de la dieta BARF pero no tenía claro de qué iba exactamente. Pensaba que era solo “dar carne cruda” y ya, pero veo que es todo un planazo de alimentación súper completo 🥩🥦🐶.
Me mola porque está explicado sin tecnicismos raros y ahora ya entiendo mucho mejor los pros y las cosas a tener en cuenta. Me ha servido en plan total 🤯💡. Voy a seguir investigando porque me parece un rollo muy top para la salud de mi perro
Mirá, yo sé que muchos están re convencidos con la dieta BARF, pero la verdad a mí no me termina de cerrar. No digo que sea mala, ojo, pero me preocupa el tema de las bacterias y de que no todos sabemos armar una dieta balanceada. Con el alimento balanceado tenés la seguridad de que viene completo, en cambio con la BARF hay que estar muy encima. Capaz para algunos funciona bárbaro, pero no creo que sea para todos los tutores ni para todos los perros.
Córdoba, Argentina
Me gustó que no vendes milagros. Con la tabla 50/30/10/10 ya me quedó claro.
Buenos Aires, Argentina
Muy clara la parte de proporciones y el ejemplo en gramos. La calculadora ayuda un montón.
Madrid, España
La neta, esto está hecho para que la banda se sienta experta, pero no para ayudar de verdad. Te avientas porcentajes, mitos, tablas, y al final igual queda la duda de ‘¿qué compro hoy y cómo lo preparo?’. Si no das un menú real y una lista de compra por peso, se queda en puro rollo bonito.
Monterrey/México
Bien explicado, aunque me faltó un menú semanal listo para copiar y pegar.
Santiago/ Chile
Está bien explicado y sin tantas palabras raras, eso se agradece. La tabla de 50/30/10/10 me ayudó un montón. Como mejora: me faltó una lista de compra semanal y un ejemplo de menú completo para un perro mediano, así tal cual para copiar.
Ciudad de México/México
Demasiado largo y con demasiadas tablas para algo que debería ser simple. Parece más una tesis que una guía práctica. Y lo de suplementos por todos lados suena a ‘compra cosas’ más que a alimentar bien. Si es para principiantes, esto les va a asustar.
Barcelona/España
Me ha gustado porque está todo ordenado: proporciones, transición y la parte de higiene. La calculadora es un puntazo para no liarte con los gramos. Lo único: yo pondría un mini resumen al inicio tipo ‘si tu perro es cachorro/senior, ojo con…’ para que la gente no se confíe.
Monterrey/México